Huele mal
9:00 horas
¡Cuidado! Los mercados empiezan a tener feos comportamientos. Ayer vimos como el S&P se volvió después de hacer máximos y cerró un dos por ciento por debajo, un reversal day típico de techos, después de que tenía todos los indicadores técnicos cortados al alza y sin sobrecompra. Además el volumen sigue en descenso haciendo muy vulnerable al mercado. Las compras institucionales siguen bajo mínimos y las ventas de los insiders acumulan ratios muy fuertes durante las últimas semanas. La línea avance-descenso (valores que suben contra los que bajan) bajó con fuerza y el macd semanal se está girando a la baja de forma preocupante. Podemos añadirle las peligrosas fechas en las que estamos, la imposibilidad manifiesta de superar la zona de congestión, el gran número de alcistas en las encuestas (50%), la debilidad del sector bancario y las últimas declaraciones de Bernanke y Obama añadiendo nubes negras en el panorama idílico que venían dibujando.
La distribución puede estar completa. La mayoría de los analistas están esperando el 1.120 del S&P donde se completa el 50% de recuperación de la caída anterior, sin embargo ya saben que mi cuenta de cinco ondas daba un 1.107 como máximo y posiblemente menos, hasta ahora hemos visto el 1.101 y podría ser suficiente. Mucha atención pues a las próximas jornadas los acontecimientos podrían precipitarse.
Les he comentado algunas veces lo curioso que resulta que algunos bancos se adelanten siempre a los acontecimientos, es como si tuvieran una bola de cristal, entre ellos el rey es Goldman, siempre tiene posiciones alcistas y bajistas en los momentos adecuados, y aparece inmerso en todas las maniobras extrañas que ocurren una y otra vez. Ayer se destapó que dicho banco financió la campaña de Obama. Nunca como ahora el mundo ha parecido una gran cloaca.
