lunes, 20 de junio de 2011

Remolinos

El S&P, como ya nos indicaba el Footsie, no se dejó contagiar el pasado viernes por la euforia europea y acabó subiendo un tímido 0,30%. Para colmo hoy los futuros están con bajadas superiores a lo avanzado en ese día, luego seguimos igual, pegados a los mínimos.
A los mercados europeos les toca recular al haberse pasado de optimistas tras el acuerdo entre Alemania y Francia en el tema griego. En estos momentos tanto los futuros del Dax como los del  Eurostock sobrepasan el 1% de pérdidas. Con todo ello es más factible la hipótesis que lanzamos el viernes de un hch invertido, ya se han dado dos requisitos, detenerse en el lugar adecuado y volverse con fuerza desde allí. A pesar de todo aún queda mucho por confirmar y la figura podría tener varias lecturas, como un triángulo o una onda plana. Por lo pronto va en camino y ya dijimos que tenía sentido desde un punto de vista técnico.
Los inversores son conscientes que el acuerdo francoalemán va más dirigido a salvar a sus bancos que a salvar a Grecia. La verdad es que Grecia no parece tener salvación alguna, demostrando que los rescates de la UE y el FMI, son en realidad un secuestro, no es de extrañar que nadie quiera su ayuda. Grecia acabará cayendo cuando los bancos con intereses allí hayan puesto a salvo sus muebles, entonces pasarán la escoba a otros países, España, Bélgica e Italia están en todas la quinielas. Los próximos meses pueden ser muy duros.
Bonos arriba y eurodólar abajo (se detuvo en la línea clavicular de la figura señalada) completan el cuadro habitual de una sesión que ya hemos visto muchas veces en las últimas semanas.
Esta semana oiremos que tiene que decir Bernanke, los inversores esperan un milagro, que anuncie algo que saque las economías y las bolsas del atolladero actual, pero poco podrá hacer. El QE2 no tuvo el mismo impacto que el QE1, un QE3, si lo hubiera, en el futuro, aún tendría menos. La realidad empieza a verse tras la cortina de humo, y es tan desagradable como siempre hemos sospechado.