lunes, 13 de junio de 2011

¿Simetría en tiempo y figura?



















     Gráfico del euro/dólar de largo plazo con velas de semana. Hay algunas curiosidades que quiero compartir con vosotros. Vaya por delante de que soy de las personas que aplican con mucho cautela la teoría de Elliott en divisas, pero lo que veo es realmente asombroso, teniendo en cuenta el muy largo plazo de los movimientos que observamos. Miren la primera formación de ABC que empezó en marzo 1985 y termino en marzo 1991, con las letras ABC en azul. Ahora miren el segundo ABC, también en letras azul, que empezó en noviembre 2000 y terminó en julio 2008. Las dos figuras han corrido la misma distancia en pips, unos 7850 para redondear. Ahora miren la onda bajista que empezó en marzo 1991 marcado en rojo WXY: hay una clara relación de Fibonacci entre las ondas W y Y, siendo el Y 1,618 veces la onda W. El total del tiempo para la formación de la ABC azul y el WXY rojo ha sido 812 semanas, de marzo 1985 hasta noviembre 2000.

Desde el máximo histórico en julio 2008 podemos hacer un recuento de formación de una onda W y una onda X. Si  este pensamiento es correcto, falta entonces la formación de toda una onda Y, que podría tener la forma de un zig zag, igual que paso en la corrección anterior de abril 1995 hasta noviembre 2000. Pueden pasar varias cosas pero si estamos ante una onda Y en zig zag hay dos claras objetivos: puede ser que la completa onda WXY va a tener la misma bajada en pips que la primera WXY, lo que lleva el euro/dólar justo a la paridad; 1 euro es 1 dólar. La segunda posibilidad es que la onda Y se va a relacionar con onda W en la misma relación como pasó en la primera WXY,  Y igual a 1,618 W, y esto llevará el euro exactamente al mínimo de noviembre 2000.

Para complementar la figura, existe tal vez una relación en el tiempo. Esta relación de igualdad marca como final de la bajada prevista a mayo/junio de 2016. Curiosamente existe un estudio muy elaborado por Bob Prechter de Elliott Waves International que marca justamente junio 2016 como final de las bajadas en las bolsas americanas, basado en un estudio de ciclos.