El bono alemán sigue mostrando una fortaleza sorprendente. A pesar de la recuperación de las bolsas, del corte a la baja del indicador técnico y de la divergencia bajista, apenas ha retrocedido unos puntos desde los máximos. La inercia alcista de los últimos dos meses le da combustible.
De cualquier forma se ha detenido en un punto clave, la onda cuatro de tres. Por el momento ha recuperado el 40% de la caída.