Fui de los que crecí con el milagro japonés. Recuerdo perfectamente cuando las viviendas en Tokyo se computaban por centímetro cuadrado y el centro de la capital valía más que todo el estado de California. El Nikkei alcanzó los 40.000 en 1.990 y 21 años después su valor no llega a los 10.000. De nuevo a precios de principios de los ochenta, toda una generación perdida. Las comparaciones son odiosas...por algo será.